La cultura club de Berlín, y quizá su modo de vida nocturna, sobrepasa las reglas marcadas. Pero, es algo natural cuando ello influye con los ingresos turísticos de un país o ciudad directamente. A pesar de esto, no es sorpresa que muchos son los que piden el cierre de centros clubbing históricos en la ciudad del techno.
Aunque debemos resaltar que esta gran cultura club, ha sido muy cuidada desde sus comienzos de una manera elegante. No se necesita ser economista para darse cuenta que son miles los jóvenes que cruzan la frontera los fines de semana en busca de noches inagotables; eso se traduce en dinero para las arcas del mercado.
El Consejo berlinés de la República Federal está muy consciente de este modelo de negocio, por lo que decide aplicar unas normas que preserven la vida nocturna. A partir de este mes de abril, cualquier constructora que desee construir apartamentos, deberá asegurarse de hacerlo alejado de los clubs y discotecas, siendo este un requisito obligatorio. Quien quiera construir carreteras, tendrá que asegurarse de que no pase por clubes y discotecas. Y así con negocios, hoteles…etc.
En el caso de que la constructora decida construir allí y gana los permisos, entonces tendrá que asegurar la propia insonorización del edificio, ya que el Gobierno berlinés no hará nada por tapar estos ruidos nocturnos de Berlín en formato música electrónica. En pocas palabras, Berlín no se calla.
Esto demuestra la intención de preservar lo local. Un reglamento surgido a raíz de multas y cierres de discotecas, una modalidad creciente que se ha visto en los últimos años. Pero ya no, Berlín es club.
Fuente: wattsshake.com
Gracias por compartir!
[mailchimpsf_form]