Fuente: InsterspecificsCollective
Hoy en día son evidentes los geniales avances de la ciencia contribuyendo a cambiar la forma en que percibimos la música vislumbrando nuevos horizontes. Poco se sabe acerca de Insterspecifics Collective que muestra un nuevo panorama.
Insterspecifics Collective es un colectivo con sede en México enfocado en experimentar la relación entre el arte y la ciencia, realizando prácticas híbridas entre las diferentes disciplinas y organismos vivos. Uno de sus pilares es la investigación a través del uso del sonido en aras de comprender la actividad bioeléctrica de diferentes organismos como bacterias, plantas, hongos y seres humanos, a través del uso de sintetizadores, el colectivo construyó un completo sistema hardware “DIY” (Do It Yourself) que catalogan como: máquinas ontológicas.
El laboratorio lleva por nombre Energy Bending, y es un instrumento compuesto por un conjunto de sintetizadores modulares hechos a la medida con herramientas de transducción, con el fin de crear sonificación en tiempo real de las propiedades eléctricas que se encuentran en algunas bacterias. En este sentido, a través de la utilización de las frecuencias y las vibraciones luego se traducen en patrones visuales. La interfaz amplifica los microvoltajes producidos por estos microorganismos transmitiendo sus características oscilatorias en señales electrónicas, sintonizadas con el reloj interno de todo el sistema, lo que produce una serie de patrones de sonidos inesperados.
Esta interesante investigación que tiene el liderazgo de Paloma López, artista y gestora cultural originaria de Guadalajara, con participación de la artista Leslie García, exploran la relación entre las formas de onda, la materia y la forma física de frecuencias, buscando una comprensión basada en patrones de nuestro contexto, para ilustrar el orden subyacente del universo y la conciencia humana, que parece estar íntimamente relacionada con las vibraciones.
El estudio demuestra cómo las frecuencias vibratorias de plantas, bacterias y agua se modifican de forma evidente cuando estas son estimuladas, dando también la posibilidad de crear música, logrando transducir (pasar de una energía a otra) energías que no pueden verse ni medirse. Esencialmente, esto significa que la instalación convierte la energía de las bacterias en sonido.
En el laboratorio trabajan con sintetizadores análogos, hardware de arquitectura abierta Arduino, todos conectados con otros instrumentos receptores de mensajes MIDI y CVS como el Korg Electribe A (EA-1) y el Teenage Engineering OP-1 y software.
Puedes ver en el siguiente video la primera versión de la instalación para este experimento.
Mira cómo se ven los organismos.
Aquí te dejamos el soundcloud de este proyecto con el sonido generado por un moho mucilaginoso.
Gracias por compartir!
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