Por: Federico Blank aka Ordep Zerep
Venezuela siempre se ha caracterizado por ser un país en el que la mayoría de sus bares y discotecas tienen un ciclo de vida efímero. Primero se ponen de moda, al poco tiempo llegan a su auge, para eventualmente pasar por un período de decadencia, desembocando generalmente en un cierre definitivo. Son contados los lugares que han roto esa regla, algunos pueden pensar que es cuestión de suerte, pero opto por creer que es más por una cuestión de gerencia y concepto. Hoy quiero hablar de un caso de estudio en particular, me refiero al ya legendario Suka Bar.
Suka Bar abrió sus puertas en el C.C. San Ignacio en diciembre del 2001, pero no es sino hasta el 7 enero del 2002 que hacen una inauguración oficial. En un abrir y cerrar de ojos, Suka pasó a convertirse en un referente internacional de la electrónica criolla. Inicialmente su espacio fue un diminuto pasillo frenteado por una la larga barra de madera que aun lo caracteriza; el discplay estaba emplazado junto a ella en un rinconcito, y la terraza no soñaba con ser lo que es hoy en día. Entre esas estrechas paredes, 6 noches por semana, comenzó a confluir lo más selectro de la fauna nocturna caraqueña, contribuyendo de esta forma con el pasar de los años a crear la mítica leyenda viviente de lo que es hoy en día Suka Bar.
A finales del año 2001 recibí una llamada inesperada que me hizo uno de sus dueños, Daniel Gómez, amigo personal y actualmente colega dj, quien me dijo lo siguiente (parafrasenado): “Bro, me acabo de meter en un peo de un bar, tengo un par de platos y un mixer y necesito de tu ayuda para conectar esa vaina”. Para ese entonces yo tendría poco más de un año mezclando, estudiaba en la misma clase de empresariales con Daniel, con quien compartía además de la amistad, gustos musicales y una gran pasión por la diversión nocturna, asi que al escuchar su llamado, me dispuse presto y veloz a conectar el discplay sin siquiera sospechar lo que estaba por suceder.
Suka Bar: una institución de la noche caraqueña
A partir de ese día comenzó la historia que hasta el sol de hoy se sigue escribiendo. Daniel junto a su hermano Rafael conformaron el binomio que le dio forma a las noches de Caracas de principios del milenio en una ciudad en la que la vida nocturna estaba en su punto más alto. Al poco tiempo de su apertura comenzaron a saborear los jugos del éxito, producto de la venta de bebidas espirituosas, por lo cual no dudaron en ampliar el bar. Decidieron alquilar el local contiguo, lo que les ayudó a subir de categoría: de bar a micro club. Realzaron la decoración hindú que los había caracterizado hasta ese entonces, cambiaron de lugar la cabina del dj, montaron una hamaca inmensa, y hasta colocaron una nueva barra adicional (la cual no duró mucho); todo esto contribuyó a la creación de un pequeño espacio en donde la asistencia espontáneamente comenzó a bailar dentro de los espacios de un reducido e íntimo local lleno de caras conocidas.
Podría afirmar que el factor clave para el éxito y sobrevivencia de Suka Bar a lo largo de todos estos años ha sido la afinidad. Resulta que sus dueños son muy amigueros, y el local se convirtió en el “hang out place” de todos sus amigos y allegados. Aunado a esto, Daniel y Rafael siempre han estado rodeados de panas con buena música (obviamente incluyéndolos); algunos (como es mi caso) comenzamos siendo los primeros dj´s en tocar en el ya mítico discplay de Suka; por ahí ha desfilado un nutrido grupo de talentos nacionales, consagrados y también nouvelles. Incluso recuerdo uno que otro personaje insigne de la escena global visitando el bar por retruque de algún otro compromiso de trabajo, tales como Magda, Marco Carola, Adam Beyer, Argenis Brito, Miguel Toro, Dubfire, y Dj Ravin, quienes estuvieron de fiesta, y hasta algunos tocaron (que yo recuerde) se lanzaron en los platos los últimos cuatro mencionados. Es importante destacar que parte de la política de Suka siempre ha sido crear una vitrina para exponer el trabajo de los nuevos talentos venezolanos, quienes en su mayoría se han proyectado positivamente en el mercado nacional e internacional.
Haciendo un recuento histórico, en términos musicales, hay que hacer mención especial a algunos de los artistas nacionales que han marcado el rumbo sonoro de Suka. Los siguientes artistas han tenido residencias prolongadas en el local: Fur Coat, Dj Afro, Trujillo, KX, Alberto Wallis, Ordep Zerep, Andrés Vegas, Oscar Fonseca, Dj Compota, More, Dj Leo, Funk-u, Julio Cesar III Venegas, Dj Rey, Savy Fontana, Dr. Turntable, David Rondón, Bambishaker, Torkins, Mellow, Moreon, Baffa, Burns, Diego Gamez, Dj Jaxx, Dj Khont, Dj Cotufa, Alfredo Naranjo, Pablo Gil, Sardiña, Jenifer Zea, Colly, Tati, Metra, Ben Armas, Las Fastastic Bitches, Miss V, Malik, Karne Frezka, Pedro Durán, Tony Aureal, Le Chu, Velazco, Ceus, Misturada, Marite, Djane Chris, Julio.Be, Gusher, Mario Romero, Jauregui, Claudio Imperatrice, Cristobal On, Juan Guttierrez, Menage y unos cuantos más que en este momento no puedo recordar.
Los años han pasado y las generaciones cambian, sin embargo Suka Bar se ha convertido a lo largo de sus más de 16 años de historia en una especie de “clubbers university”, haciendo énfasis en profesar a sus alumnos lo más selecto de la música electrónica y orgánica en lo que a house, jazz, bosa, hip hop, electro y techno se refiere. A esto se le puede sumar la buena vibra que siempre se puede sentir, la cual no tiene nada que envidiarle a la que brota de cualquier club primer mundista.
Actualemte, a pesar de los avatares de la crísis económica, las nuevas generaciones continuan confluyendo con algunos de los originarios de esos primeros años de gloria de Suka Bar, creando una atmósfera heterogénea, idónea para pasar un buen rato entre amigos con muy buena coctelería, música de alta calidad, excelente sound system, eficientísimo staff, y gente guapa en un entorno seguro. Han sido muchas las noches memorables de Suka que ya forman parte del subconsciente colectivo de la vida nocturna caraqueña, todos los que hemos ido tenemos gratos recuerdos y fascinantes historias, asi que si aun no has ido, ponte las pilas y llégate para que vivas la experiencia!
Long live Suka!
Gracias por compartir!
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