Este último emitió por primera vez una orden de cese y desistimiento de Ultra en enero, citando un reclamo al lugar de la isla después de usarlo en dos ediciones anteriores. Esto fue seguido por una demanda, que posteriormente ha sido desestimada por los tribunales.
«[E] l la Demanda falla para alegar plausiblemente cualquier conspiración ilegal o acuerdo anticompetitivo entre los Demandados. El demandante se basa exclusivamente en alegaciones concluyentes de conspiración no respaldadas por ninguna alegación objetiva», declara la decisión.